Ayer jueves, mientras hacía las prácticas de Electrónica Analógica, me dediqué a pasearme por las webs de venta de entradas. Con gran preocupación descubrí el lleno casi absoluto para el viernes. Así que sentí la imperiosa necesidad de acudir al cine a verla y no dejar pasar ni un día. Expliqué la situación al alto mando y, aunque con alguna que otra ausencia, adelantamos la visita al cine. Y es que no se puede ir de cinefila por la vida sin ver las películas el día del estreno, para ser la primerita en poder hacer una crítica.
En ésta esperada tercera parte de las aventuras de los «Piratas del Caribe», Will Turner (Orlando Bloom) y Elizabeth Swann (Keira Knightley) se han aliado con el Capitán Barbossa (Geoffrey Rush) con el desesperado objetivo de liberar al Capitán Jack Sparrow (Johnny Deep) de su terrorífica trampa en la bodega de Davy Jones. Mientras, el escalofriante barco fantasma, El Holandés Errante y Davy Jones, en manos de la Compañía de las Indias, provocan el caos.
La película sigue en la misma línea que las anteriores entregas. El inicio es más bien lento, con varias referencias a anteriores entregas. En éste caso, la verdadera fuerza de la película se encuentra en las escenas finales, el desenlace. Inesperado y repentino.
Nunca se puede apreciar del todo la maestría de las interpretaciones en las versiones dobladas. Aun así, me atrevo a decir que me ha sorprendido gratamente la actuación de Keira Knightley, que ha mejorado bastante respecto a las anteriores entregas. A ésta mujer le van más los papeles al estilo «Quiero ser como Beckham» que los del estilo muchacha desvalida. En cuanto a Orlando Bloom decir que no ha evolucionado demasiado. Me sigue gustando bastante más como guapo que como actor. Aunque el broche de oro lo pone Johnny Deep, como ya viene siendo costumbre. El actor de mayor talla y más carismático de todo el reparto.
El vestuario ha sido impecablemente elegido, se mezclan multitud de culturas y se logra un estilo étnico y a la vez actual. Y los efectos especiales consiguen, en ocasiones hacer sombra a los de las anteriores entregas, que dejaron el listón bastante alto. Estos dos aspectos, por sí sólos hacen que sea rentable ir a verla.
Pero no todo son elogios. En mi opinión (y es sólo una opinión) argumentalmente no se ha logrado superar a la primera entrega. En el resto de aspectos comentados sí se trata de la mejor parte de la trilogía.
Así que en general, una película de visionado prácticamente imprescindible. La historia, como ya viene siendo costumbre viene salpicada de escenas de humor que la hacen bastante amena y divertida. Sin duda ha merecido la pena pasarme por allí.
Mi puntuación: 7 sobre 10
El trailer en español (Quicktime) aquí.
La web oficial en español aquí.
Advertencia: Al final de la película y después de todos los créditos, escena extra.